Riku Färm
Las modernas tecnologías de templado aportan a los procesadores de vidrio una importante eficiencia energética. Sin embargo, algunos fabricantes de líneas de templado hacen afirmaciones sobre el ahorro energético que parecen demasiado buenas para ser ciertas. Por lo general, estas afirmaciones son precisamente eso: falsas.
A continuación se presentan dos afirmaciones con las que me he topado recientemente. Si escucha alguna de ellas, puede estar seguro de que le están engañando.
Afirmación nº 1: Templado de vidrio de 4 mm con un consumo energético inferior a 1,3 kWh/m2
Comprender lo que es físicamente posible puede ayudarle a descifrar afirmaciones exageradas. La buena noticia es que no hace falta ser físico para ello. Basta con recordar la siguiente equivalencia: 1,9 kWh/m2 para un vidrio de 4 mm.
Cualquier afirmación de que el vidrio de 4 mm se templa con menos energía que esto es una clara señal de estafa.
He aquí un ejemplo de una afirmación real hecha por un fabricante de líneas de templado:
-> Afirmación – Consumo de energía: 1,27 kWh/m2
El problema es que calentar el vidrio desde la temperatura ambiente hasta 630 °C requiere al menos 1,9 kWh/m2. Este es el mínimo absoluto sin pérdidas.
No importa si se encienden y apagan las resistencias o si se controla la convección en función de por donde se desplace el vidrio en el horno. Una hoja de vidrio de 4 mm siempre absorberá al menos 1,9 kWh/m2, independientemente de cómo se caliente.
Además, siempre se necesita energía debido a las pérdidas de calor y para el templado y enfriamiento, por lo que es físicamente imposible alcanzar un valor inferior en la práctica.
Afirmaciones como la anterior contradicen las leyes de la física.
El consumo real depende del grosor del vidrio, de la eficacia de la carga y de la optimización del proceso, pero incluso en condiciones ideales, un vidrio de 4 mm requiere al menos 2,5-3,0 kWh/m².
Este blog proporciona otros datos valiosos sobre el consumo de energía de su línea de templado y cómo minimizarlo.
Afirmación nº 2: La aseveración de que el consumo de energía de la afirmación nº 1 se ha demostrado
Dicen que ver para creer, pero a veces incluso esto es engañoso.
Si ves algo que contradice las leyes de la física, no puede ser cierto.
En el caso de esta afirmación, hay al menos dos posibles razones para que las mediciones sean inexactas o engañosas:
1. Medir sólo una carga en un horno precalentado
Con los ajustes adecuados de la receta y si el horno y sus estructuras ya están calientes, se puede calentar una sola carga de vidrio con un mínimo de energía adicional. En estas circunstancias, el horno funciona en su estado de mayor eficiencia energética, lo que lo convierte en el momento ideal para las mediciones.
Este escenario crea una ilusión de bajo consumo energético. Sin embargo, en condiciones reales de producción, el horno siempre tiene que compensar el calor absorbido por el vidrio. Para obtener una imagen precisa, el consumo de energía debe medirse siempre durante un periodo más largo.
2. No tener en cuenta el aire comprimido
Si el horno utiliza aire comprimido, la energía necesaria para el compresor no suele medirse ni incluirse en el consumo total de energía. Esto puede dar lugar a cifras engañosamente bajas.
¿Promesas vacías?
No me malinterprete: la tecnología actual ofrece grandes oportunidades de ahorro energético. Sin embargo, cuidado con las afirmaciones engañosas sobre el bajo consumo energético de los atemperadores. Estas promesas pueden parecer atractivas, pero las decisiones basadas en ellas serán decepcionantes.
Tanto si está pensando en un horno completamente nuevo como en una mejora de la eficiencia energética, diríjase a un fabricante de atemperadores de confianza que pueda ayudarle a tomar una decisión informada y basada en hechos.
Si desea profundizar en este tema, consulte los siguientes enlaces.
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