¿Apagar un horno de templado ahorra realmente energía?

Algunos fabricantes sugieren que se puede ahorrar energía calentando el horno desde la temperatura ambiente en sólo una hora al comienzo de cada turno. ¿Reduce realmente este planteamiento el consumo de energía? Veamos si esta prometedora afirmación se sostiene.

Un turno y apagado

Si sólo funciona un turno al día y apaga el horno por la noche en lugar de dejarlo en el llamado modo de almacenamiento en caliente, es muy poco probable que realmente esté ahorrando energía.

Un calentamiento incompleto provoca problemas de calidad

Calentar el horno desde la temperatura ambiente hasta casi 700 °C en sólo una hora significa que las estructuras del horno no estarán completamente calientes cuando comience la producción. Esto provocará fluctuaciones en la calidad, lo que dará lugar a rechazos de vidrio. Al final, desperdiciará más vidrio y esfuerzo por el calentamiento desigual.

Daños en el horno por calentamiento rápido

Aún más importante, acelerar el proceso de calentamiento somete a las estructuras de acero del horno a una tensión extrema. Con el tiempo, se producirá un desgaste significativo que acortará la vida útil del horno y aumentará los costes de mantenimiento. Un calentamiento controlado es esencial para prolongar la vida útil de su equipo.

¿Cuál es la mejor solución?

En lugar de apagar el horno, recomendamos mantenerlo en modo de almacenamiento en caliente a unos 550 °C. De este modo se protegen las estructuras del horno. De este modo se protegen las estructuras del horno y se garantiza que esté listo rápidamente para una producción estable.

De hecho, la energía utilizada en el modo de almacenamiento en caliente, combinada con la necesaria para alcanzar la temperatura de producción, suele ser inferior a la que se consume apagando completamente el horno y recalentándolo a partir de la temperatura ambiente a la mañana siguiente.

La única forma de que apagar el horno por completo ahorre energía es si hay fugas importantes en el horno, por ejemplo, por las aberturas de los rodillos cerámicos.

En este blog encontrará más consejos prácticos para reducir el consumo de energía en las operaciones de la línea de templado.

¿Cuál es la conclusión?

Apagar un horno de templado no supone un ahorro real de energía, sino un mayor desperdicio de vidrio y un estrés y desgaste innecesarios del horno. No es precisamente una solución tentadora.

Aunque la tecnología moderna de templado ofrece oportunidades reales de ahorro energético, afirmaciones engañosas como ésta pueden llevar fácilmente a los transformadores de vidrio por el camino equivocado.

Al evaluar la eficiencia energética de un horno, asegúrese de basar sus decisiones en hechos, no en afirmaciones demasiado optimistas que pueden acabar costándole más. Póngase en contacto con un socio experto y de confianza que pueda ayudarle a filtrar el ruido y evitar errores costosos.

Consulte nuestros artículos anteriores sobre otras afirmaciones falsas sobre el ahorro de energía.

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Acerca del autor

Riku Färm

With a background in industrial engineering and management, Riku is Director of Heat Treatment Product Management & Sales Engineering at Glaston. He is keen on working with customers and developing new business- and technology-related things – which makes product management a natural fit for him. In everything Riku does, he aims to ensure that glass processing customers are as successful as possible. This drives Riku and challenges him every day to think about what could be done better. Riku is an e-sports enthusiast. Aside from watching, he also enjoys playing the games that he actively follows.

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